El pasado lunes día 1 de febrero se celebraba el primer debate electoral previo a las elecciones autonómicas de Castilla y León del próximo día 13 de febrero. Pero en él vimos una imagen que hace años podría parecernos normal, pero que en la actualidad se ha convertido en extraña. Tan solo 3 contendientes. Solo 3 de los hasta posibles 9 candidatos debatiendo. ¿Dónde estaba el resto?
Leyes anacrónicas
Desde el fin del bipartidismo en España, hay un gran revuelo cada vez que hay un debate electoral. Siempre surge la duda de quién debe acudir a ellos. Si bien es cierto que las leyes electorales suelen ser las que dicten quienes deben ser los contendientes, en ocasiones resulta algo anacrónico o incluso antinatural, que partidos con mucha representación a nivel nacional o con gran pujanza en las encuestas queden excluidos.
En este caso concreto de Castilla y León, el artículo 31 bis de la Ley Electoral de Castilla y León (que data de 1987) estipula que sólo podrán participar en los debates electorales los partidos políticos con grupo parlamentario propio en las Cortes. Esta condición solo la cumplen actualmente PP, PSOE y Ciudadanos. Por este motivo, otras formaciones como VOX, Podemos, UPL o las plataformas de la llamada “España Vaciada” no han podido participar. Si echamos un vistazo a las encuestas, podemos ver como casi todos estos partidos, no presentes en el debate electoral, tienen una intención de voto mayor que el partido naranja, que podría quedarse sin representación
Conociendo esto, nos podemos plantear el debate entre lo legal y lo ajustado a la realidad. Sabemos la dificultad que implica que las leyes sean capaces de actualizarse a cada momento, pero también estas deben tener la capacidad de ser en cierto modo más flexibles, especialmente en ámbitos tan cambiantes en la actualidad como es la política.
Disparidad de criterios
El Tribunal Supremo desestimó la petición de VOX para poder participar en le debate del pasado lunes, ateniéndose a la ley vigente. Esto es lógico, ya que no se pueden cambiar o no respetar las normas a la torera. Sin embargo el candidato de la formación de Abascal mostró su descontento en redes sociales.
Hemos sido excluidos del debate electoral. Los castellanos y leoneses no podrán escucharnos hoy. ¿La razón? Una ley de 2016 para blindar a los partidos en el poder.
Pero VOX ya representa a millones de españoles. Y Castilla y León no es una excepción.
Nos vemos en las urnas.
— Juan García-Gallardo (@juan_ggallardo) January 31, 2022
Una vez acabado el proceso electoral se debería de llevar a cabo, en pro de la democratización del sistema, una profunda reflexión en toda España acerca de quienes tienen derecho a participar en los debates.
Otra de las cuestiones que deberían tenerse en cuenta ene esta reflexión es la unificación de criterios. Hace unos meses, en las elecciones catalanas, vimos debatir a todas las fuerzas políticas con representación en las encuestas, tuvieran o no representación en el Parlament. En la Comunidad de Madrid también hubo un debate con todos los candidatos con opciones de representación. Sin embargo, ahora vemos como en Castilla Y León se quedan fuera partidos que sí tienen representación.
Una vez más, aunque sea de manera legal, la división de criterios reina en España.
Debates electorales, claves en campaña
Cada debate electoral tiene una gran importancia en las campañas para los partidos. Pese a que no siempre hagan cambiar de opinión a muchos ciudadanos, es habitual que los menos informados reserven este día para conocer más a los candidatos, dejándose seducir por su oratoria y sus propuestas.
Es por este motivo que todos quieren estar presentes. Tener la oportunidad de hablar de frente y sin filtros a los ciudadanos es algo que nadie quiere desaprovechar.
En definitiva, el caso de Castilla Y León es únicamente un ejemplo del anacronismo y falta de pluralidad de algunas leyes propias de la era del bipartidismo. Podemos debatir si los que deben estar presentes sean todos los que tienen representación o todos los que aparecen en las encuestas. Pero queda claro que la exclusión de partidos con representación a nivel autonómico y nacional y con fuerza en las encuestas no favorece la democratización.
Los ciudadanos merecen escuchar todas las propuestas confrontadas a la vez. Se celebrará un segundo debate electoral en los próximos días y, aparentemente, el único cambio será que finalmente Igea (Ciudadanos) podrá salir del confinamiento y estar presente junto a Mañueco (PP) y Tudanca (PSOE). El resto de candidaturas, si nada cambia, tampoco tendrán la oportunidad de mostrar a los votantes sus ideas y debatir con el resto de contendientes.
Pese a todo, en ASESMAP os mantendremos al tanto de lo que ocurra en esta campaña electoral y las consecuencias que pueda tener el resultado del próximo 13 de febrero en Castilla y León.
ASESMAP – ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE MARKETING POLÍTICO Y ELECTORAL
MARCANDO LA ESTRATEGIA
