AMLO. (Photo by Hector Vivas/Getty Images)

El próximo día 6 de junio se celebran elecciones locales y federales en México, en las cuales se elegirán a los miembros de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, de los 32 congresos locales y 15 gubernaturas autónomas.

El Congreso Federal, se compone de 500 parlamentarios o diputados federales, que deberán ser de nuevo elegidos por los mexicanos, como sucede cada 3 años, haciendo coincidir esta elección con la presidencial y del senado cada dos turnos. De los 500 diputados, 300 se eligen de manera directa, siendo elegido cada uno en uno de los 300 distritos federales que tiene el país. Los otros 200 son elegidos proporcionalmente en listas de partidos que se presentan en las cinco circunscripciones electorales que tiene México.

A estos últimos se les conoce como diputados plurinominales y han sido criticados durante décadas por estar acusados de defender más los intereses de sus partidos que de los mexicanos. Lo que mucha gente ignora, es que estos diputados plurinominales representan a las personas que votaron por partidos que no lograron la victoria, y que, sin su presencia en el congreso, los votos para aquellas formaciones minoritarias que se quedaron fuera de la elección no tendrían representación en el Congreso y, por lo tanto, se consideraron necesarios desde la reforma político-electoral de 1977, con el objetivo de aumentar la representatividad democrática.

Actualmente, la división político-territorial de México se compone de 32 entidades federativas (31 estados y la Ciudad de México) que son estados libres y soberanos, a los cuales la Constitución Política Mexicana les concede libre determinación para conformarse de la manera que deseen. A su vez, se divide en 2.469 municipios y 16 demarcaciones territoriales en la capital. Estas entidades de la Federación Mexicana cuentan con amplios poderes: pueden gobernarse mediante leyes propias, aunque sin contradecir a la Constitución y cada uno tiene su propio Congreso, su Poder Ejecutivo y su Tribunal Superior de Justicia. Por ello, las elecciones de sus gobernadores, 15 de las cuales se producirán el próximo día 6 de junio junto con las legislativas, son de gran importancia para la política nacional mexicana.

El poder, tanto ejecutivo como legislativo, que se pueda ejercer desde estos estados, podrá a partir de ahora empezar a ser más cercano al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO, en adelante), ya que su partido podría controlar nuevos estados, tal y como apuntan algunas de las encuestas más recientes, aunque de esto hablaremos más adelante.

La creación de Morena en 2011 ha hecho que aún no haya podido presentar a sus candidatos a gobernador en algunos estados (que tienen un periodo de 6 años), por lo que será la primera vez que se presente en algunos de ellos. Actualmente el partido del presidente AMLO gobierna en 6 estados, pero podría hacerse con 10 o más nuevos estados a partir del próximo 6 de junio, lo que le permitiría tener la mayoría absoluta de estos, facilitando la aprobación de leyes federales al presidente a nivel nacional, ya que para ellas se requiere la aprobación del 50% + 1 de los estados, que en este caso serían 17.

 

Breve Historia Hasta el Presente (1994-2021)

Desde el año 1994, muy convulso y trascendente para la historia política mexicana, México inició un proceso de liberalización económica (tras la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte). A principios de ese año y como respuesta a este Tratado, comenzó la insurrección armada del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, liderado públicamente por el Subcomandante Marcos. Esta fecha también es recordada por los mexicanos como el año en el que, en plena campaña presidencial, el entonces candidato del PRI, Luis Donaldo Colosio, fue asesinado después de pronunciar su discurso en acto de campaña.

Estos acontecimientos, sumados a un narcotráfico incansable y cada vez más violento, coincidieron con la época de crecimiento macroeconómico, logrando suscribir más acuerdos comerciales que ningún otro país en el mundo. No obstante, la precarización del empleo y el empobrecimiento de las clases populares, unido a índices de corrupción altísimos, desgastó al único partido que había gobernado México por casi ochenta años.

       El Subcomandante Marcos.

 

Así, con la victoria en el año 2000 de Vicente Fox Quesada (abanderado del PAN), se rompió el continuismo del PRI, siendo el Partido de Acción Nacional quien ostentara la Presidencia del Estado mexicano durante dos legislaturas, hasta 2012. En las elecciones de 2006, tras el primer mandato del PAN, comienza la carrera política del actual Presidente de México, AMLO. Este se presentó por el PRI y fue derrotado por Felipe Calderón, que llevó a cabo una agresiva campaña de miedo (“López Obrador es un peligro para México”), dándole la victoria con una diferencia porcentual de menos de 1 punto (AMLO: 35.29%, Felipe Calderón: 35.91%). Esto refuerza la idea de los sistemas presidencialistas como aquellos en los que una victoria es posible únicamente con un voto de diferencia.

En las elecciones de 2012 el PRI vuelve a asentarse en el poder, gracias a una creativa y visual campaña, siendo Enrique Peña Nieto el presidente durante el mandato hasta 2018. AMLO volvió a quedar en segundo lugar, no obstante, un año antes había creado Morena, un proyecto para hacerse con la presidencia que tenía que elaborar una fuerte organización de cuadros internos, cuerpos técnicos, registro nacional, etcétera. El sexenio de Peña Nieto estuvo marcado por numerosos escándalos de corrupción política así como asesinatos, por lo que AMLO aprovechó para fortalecer Morena y preparar su candidatura de cara a las siguientes elecciones: hizo campaña durante este tiempo y visitó municipio a municipio todo México (probablemente sea el único candidato presidencial que conozca y haya visitado absolutamente todos los municipios de su país) denunciado la corrupción que los medios señalaban teniendo a Enrique Peña Nieto como responsable

Las elecciones de 2018 dan la victoria a AMLO con una campaña antiestablishment donde el candidato se presentó como la alternativa contra “la mafia del poder” que representaban partidos como el PRI (a pesar de haber sido candidato a la Presidencia por el mismo), así como empresarios y demás políticos opositores. Consiguió una amplia ventaja, siendo el candidato con más amplio margen de victoria desde la alternancia de principio de siglo del PAN.

 

 

¿Quién es quién?

Actualmente el partido Morena (Movimiento de Regeneración Nacional), de ideología izquierdista y dirigido por el actual presidente AMLO, cuenta con una mayoría absoluta en el Congreso mexicano, ostentando 256 de los 500 legisladores además de los aliados de partidos como el PT, PVEM, PES, entre otros. En el Senado, Morena cuenta con 60 de los 128 escaños, además de los 6 del PT y el mismo número del PVEM. En estas próximas elecciones, buscará revalidar esta mayoría para seguir siendo la fuerza política dominante en el país, asunto difícil en estos momentos en los que se espera que mantenga la presidencia, pero pierda la mayoría absoluta hasta el momento.

 

Los otros tres principales partidos mexicanos son el PRI y el PAN y el PRD, que hasta 2018  los dos primeros eran los únicos partidos en haber ganado las elecciones presidenciales.

 

El PRI (Partido Revolucionario Institucional) es un partido político de ideología neoliberal. Actualmente cuenta con 48 legisladores en el congreso y 13 senadores, siendo la tercera fuerza política del país. Gobernó el país ininterrumpidamente desde el año 1930 al 2000, en los cuales su ideología ha ido variando, por lo que es uno de los partidos políticos mexicanos más importantes en la historia política patria, aunque ahora no pase por su mejor momento en términos electorales.

 

El PAN (Partido de Acción Nacional) es un partido de derecha, democristiano, que ha ostentado la presidencia de la República mexicana en dos ocasiones consecutivas, en el año 2000 y 2006, consiguiendo romper la larga hegemonía del PRI. Desde entonces, el partido ha sufrido altibajos, conservando gubernaturas, consiguiendo arrebatar algunas al PRI, pero sin volver a conseguir los resultados de principios de siglo.

Otro importante partido mexicano es el PRD (Partido de la Revolución Democrática), un partido de centro-izquierda y socialdemócrata, fundado en 1989 por algunos miembros de la facción más izquierdista del PRI, denominada Corriente Democrática, entre ellos el actual presidente AMLO, quien fuera jefe de Gobierno de la Ciudad de México entre 2000 y 2006. Cuenta actualmente con 2 gobernadores y 12 diputados federales, siendo un partido minoritario que a menudo se integra en coaliciones con otras formaciones, como hará en las próximas elecciones.

Estos tres partidos, (PAN, PRI y PRD), han conformado una coalición llamada “Va por México” para las próximas elecciones legislativas, con la intención de que, yendo unidos, puedan vencer a Morena y acabar con la mayoría absoluta que tienen estos en el Congreso. Estos dos primeros, si bien se encuentran a distancia considerable de Morena, conforman un grupo que dista con creces de los minoritarios. Se presentarán en 219 de los 300 distritos federales mexicanos. Además, también se repetirá esta coalición en muchos de los estados en los que se celebrarán elecciones a su gubernatura. El sistema mayoritario mexicano hace que por separado estos partidos tengan unas menores posibilidades, debido especialmente al empuje y crecimiento de Morena en los últimos años.

Estas elecciones se producen en mitad del mandato presidencial de AMLO, que, como Joe Biden y Guillermo Lasso, ganó después de tres elecciones (2006, 2012 y 2018), e inició su mandato en el año 2018 para los seis años siguientes, por lo que, al encontrarnos en el ecuador del sexenio, este seguirá en el poder los tres próximos años independientemente del resultado que arrojen las urnas.

Los casi tres años de Gobierno de AMLO, con decisiones controvertidas, su defensa de candidatos señalados por violación, pederastia y narcotráfico, el accidente del metro la pasada semana y una dudosa gestión de la pandemia ahora estabilizada con buenos índices de vacunación, no ha visto aún los resultados prometidos de lo que anunció como Cuarta Transformación. La paralización de sus planes de reforma estructural del poder judicial o el plan energético, entre otros, no ofrecen resultados al pueblo mexicano que aguarda y confía en este candidato, que resiste con altos índices de intención de voto.  Esta resistencia sorprende también por los recientes escándalos acontecidos a la candidatura de Morena, especialmente la inhabilitación de Félix Salgado Macedonio, acusado de violación, muy cercano a AMLO. A pesar de la pérdida de popularidad del candidato por titulares incendiarios dudando de la gravedad del virus, lo cierto es que el ritmo de vacunación con cinco prototipos de vacunas es de los más altos de América, lo que será un logro exhibido por el presidente con buena respuesta electoral.

La exigencia de responsabilidades a las autoridades gubernativas tras el accidente del metro el pasado lunes 3 de mayo, suma otra piedra en el camino a un presidente que parece resistirlo todo. La Ciudad de México lleva gobernada por compañeros de AMLO y por él mismo desde hace más de veinte años, por lo que la rendición de cuentas que pide parte de la ciudadanía está afectando a la reputación del Presidente, cayendo en 4 puntos su reputación, manteniendo la tendencia decreciente mostrada en las encuestas de abril con respecto a las de marzo (Fuente: Cae 4 puntos la aprobación de AMLO y se ubica en 57%).  La oposición en las calles, encabezada por un fuerte movimiento feminista al alza, tiene cada vez más presencia mostrando la indignación ciudadana. No obstante, los partidos opositores a Morena no parecen estar cumpliendo su labor institucional a la hora de vehicular el descontento, faltando impulso, unidad y estrategia a la oposición parlamentaria. Tras el intento de coalición masiva contra Morena (Va por México), la desarticulación opositora queda patente en las encuestas, por lo que si esta aspira a algo más que simplemente AMLO pierda la mayoría absoluta (para hacer frente a esta situación le bastaría pactar con sus socios habituales: PT y PVEM), será necesario que trabajen conjunta y cohesionadamente.

 

¿Qué dicen los números? 

 

 

Fuente: ElFinanciero.com.mx Cae 4 puntos la aprobación de AMLO y se ubica en 57%.

Los sondeos publicados hasta mayo de 2021 muestran una feroz batalla entre Morena y sus aliados y el bloque contrario conformado por el PRI, el PAN y el PRD (históricamente rivales acérrimos), pudiendo existir dudas acerca del mantenimiento de la mayoría absoluta o la limitación del poder de AMLO, dependiendo de cómo éste sepa manejar el último mes antes de la llamada a urnas para que su popularidad deje de caer. No obstante, será muy difícil para el resto de los partidos disputar la presidencia y conseguir una victoria que, aparente y momentáneamente, será para Morena. De esta manera, el escenario más probable tras el 6 de junio para México será la pérdida de la mayoría absoluta, a pesar del mantenimiento en el poder del Movimiento de Regeneración Nacional. No obstante, si bien el futuro inmediato parece continuista y asegurado para los de Obrador, truncando la mayoría de Morena puede prepararse un escenario propicio para la deposición de éste y el cambio de poder en próximos comicios, más aún con porcentajes de indecisos oscilantes del 20% que podrían cambiar el curso del resultado electoral, tanto en estos como especialmente en futuras elecciones. Por lo tanto, lo que aquí realmente está en juego es la futura arena de batalla para hacer frente a la coalición Morena y preparar una alternancia de poder entre modelos ideológicos, fortaleciendo y organizando a la oposición para ser digna rival en futuros comicios de un AMLO que parece resistir cualquier escándalo.

La situación en cada uno de los estados es imprescindible para dibujar fielmente el incierto futuro que aguarda a los mexicanos en el medio plazo. Actualmente, Morena controla 6 de los 31 estados mexicanos (y Ciudad de México), el PRI gobierna 11 (siendo el partido que más estados domina), el PAN, 9, repartiéndose los restantes entre el PRD (2), Movimiento Ciudadano (1), PES (1), un candidato sustituto y un independiente. En estos comicios, se eligen gobernadores por 15 de estos 31 estados, alternando así los periodos electorales como mecanismo de control o check and balance con el fin de evitar que se elijan a todos ellos a la vez, situación que daría demasiados poderes a la preferencia presidencial del momento, sin diferenciarla de los representantes estatales.

Morena ganaría, muy probablemente, Sonora, Zacatecas, Sinaloa, Tlaxcala, Colima, Campeche y Nayarit, conservando el único territorio en juego en esta elección que ya gobernaba un representante de su partido. De esta manera, Morena se haría con un total de 13 estados, actualizando así sus resultados de 2018. Territorios en disputa, con los candidatos muy igualados entre Morena y la gran coalición del PRI-PAN-PRD son Michoacán, Guerrero (la victoria parece clara si finalmente Evelyn Salgado se presenta por su padre, acusado de violación y apartado como candidato) y San Luís Potosí (Fuente: Mitofsky).

Nuevo León, anteriormente gobernado por un candidato independiente, es el Estado mexicano que mayor porcentaje de PIB aporta al conjunto del país, por lo que ganar Nuevo León es prioritario y supone más que una simple victoria de gubernatura. La candidata de Morena, Clara Luz Flores, que encabezaba las encuestas, cayó en picado tras la publicación por parte del candidato priista Adrián de la Garza de un vídeo grabado en 2016 en el que se ve a la candidata reunida con el líder de la secta NXIVM (Nexium), condenado a 120 años de prisión por delitos de tráfico de personas, explotación sexual y pornografía infantil, charlando sobre populismo y pidiéndole consejo para gobernar. Es por esto por lo que actualmente Samuel García, candidato de Movimiento Ciudadano, encabeza las encuestas muy cerca de De La Garza, y se espera que el cuarto lugar del PAN asegure la gubernatura en este Estado. No obstante, la Fiscalía se encuentra en estos momentos investigando a Adrián de la Garza, así como a Samuel García, por delitos de corrupción electoral. Esto podría hacerles caer en las encuestas, favoreciendo así la poco probable remontada de la candidata de Morena. Los partidos afectados, se defienden afirmando que estas acusaciones forman parte de una estrategia orquestada por AMLO para hacerse con Nuevo León. En esta estrategia, no sólo para arrebatar estados en el presente, sino para tratar de manchar la imagen de los partidos permanentemente, también se ha visto afectado el gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca (del PAN), acusado de corrupción y vínculos con el narcotráfico. De la misma manera, la oposición busca hacer patente que las promesas de regeneración de AMLO son falsas y que el país no ha cambiado durante su mandato: los escándalos de corrupción, narcotráfico y delitos sexuales están a la orden del día.

De esta manera, Morena mantiene su Estado en juego (Baja California), y arrebata a sus competidores otros 6, como proyección de sus resultados conseguidos en comicios anteriores, así como formación joven que aún no estaba representada en muchos estados. Esta información, al igual que la intención de voto a nivel presidencial, puede variar en cualquier momento.

Tras la tendencia al alza de Morena a partir de junio de 2020, en el último mes todas las encuestas apuntan a una pérdida de la enorme ventaja que la formación granate ha tenido hasta el momento. El proceso de exigencia de responsabilidades por el reciente accidente de metro, unido a la opinión a cerca de la gestión de la pandemia, así como las polémicas acusaciones vertidas sobre candidatos de Morena perjudican a la formación y, de mantenerse la situación actual sin contar con logros que AMLO pueda reivindicar durante su mandato, en futuras elecciones podría reducirse la gran ventaja y surgir competidores con opción de cambiar el color de la Presidencia de México. Hasta el 6 de junio, seguiremos informando con ASESMAP, actualizando los datos para observar si esta tendencia varía.

 

Alfonso Toribio del Hierro

Carlos Ruiz Barro

 

Por Asesmap